Para pasar unos días en familia en un entorno privilegiado, existen muchas posibilidades, pero ¿has pensado alguna vez en alojarte en un albergue juvenil?. Es una opción económica y que aporta muchas ventajas.

Además, al contrario de lo que pueda parecer, dado el nombre con el que se conoce este tipo de alojamientos, suelen adaptarse a todo tipo de demandas, sin límite de edad, ya sea de jóvenes, adultos, grupos y familias, entre otras.

Los albergues de la REAJ,  Red Española de Albergues Juveniles, cubren los principales destinos turísticos así como las ciudades más importantes de España, y se encuentran ubicados en lugares idóneos para la práctica de actividades recreativas, deportivas, culturales y medioambientales.

Para poder alojarse en esta red de albergues es necesario conseguir un carné de alberguista. En el caso de las familias, existe la opción de sacar un carné familiar, que puedes usarse de manera colectiva o individual, si haces una escapada con amigos. El precio de este carné, imprescindible para poder alojarse en alguno de los 260 albergues juveniles de España, 4.000 albergues repartidos por todo el mundo,  es aproximadamente de 21 euros, con un periodo de validez de un año.

Se trata de alojamientos confortables, limpios, donde compartir experiencias y disfrutar del entorno, pero sin lujos, como el albergue de Los Batanes, en Rascafría, donde estuvimos alojados el fin de semana pasado, y que se encuentra en una zona privilegiada, entre el Monasterio El Paular y la zona recreativa de Las Presillas, con las piscinas naturales.

A veces disponemos de recursos a nuestro alrededor, que no utilizamos, porque simplemente no sabemos que existen…